El día arribó al bosque, la fogata ya solo
expulsaba humo y Meta Caballero se había retirado, no obstante, Kirby
aún reposaba. Posteriormente interrumpió su somnolencia (con trabajo).
Tomó sus cosas y las metió en la canastilla. Al darse cuenta de la
ausencia de su compañero lo buscó en los alrededores; como no lo halló
echó la canastilla en su espalda para regresar a casa. No pasó mucho
tiempo cuando se percató que estaba perdido.
Caminó y caminó, apreciando gran cantidad de animales
y plantas raras; hermosos paisajes y barrancos peligrosos. Entre más
lejos iba más le gustaba el bosque. Todo lo que hasta entonces había
visto lo desconocía; a pesar de que en muchas de sus aventuras pasó por
numerosos bosques, quedaban otros tantos en los que nunca se adentró. En
cierto momento de su trayectoria empezó a oír un canturreo, ¡había
alguien más en el bosque! Conforme avanzaba más el canturreo se hacía
más fuerte. La voz parecía ser la de una chica, aunque Kirby no lograba
ver ver a alguien. Se asomó a través de unos arbustos y ahí estaba la
persona que tarareaba, parecía estar haciendo un dibujo.
-Hola Adeleine- le dirigió Kirby acercándose. -¡Cuánto
tiempo sin verte!
-¡Hola Kirby!- Contestó la chica, dejando de atender su
dibujo. -Si, el tiempo pasa muy rápido. ¿Y qué haces aquí en el bosque?
-Vine a pasar la noche, pero ahora estoy perdido ¿sabes
cómo salir de aquí?
-Claro, sígueme; te llevaré a la salida.
-¿Vives aquí, en el bosque?- preguntó Kirby cuando
llevaban un gran tramo recorrido.
-No, es solo que vengo aquí a veces para pintar. -le
respondió Adeleine- El bosque es tranquilo y silencioso, perfecto para
pintar; pero si quieres saber dónde vivo, pues tengo varios lugares. Yo
viajo por todo Dream Land buscando lindos paisajes, criaturas y otras
cosas para plasmar en una pintura, he construido casas en muchas áreas:
tengo una en este bosque, otra la tengo en el Océano Naranja, otra en la
Pradera del Yogurt, otra y donde paso la mayor parte de mi tiempo está
en el Parque Nublado; también tengo otra en las Islas Flotantes... poseo
casas en casi todo Dream Land.
Kirby quedó sin decir nada.
-Bueno, creo que después de aquí ya no tendrás problemas,
solo sigue el camino y llegarás a la salida.- dijo finalmente Adeleine.
Kirby le agradeció y se fue. Después de un rato Kirby
ya estaba en el campo, cansado, llamó a la Estrella Warp para ir a casa.
Al siguiente día, Kirby caminaba por los campos
encontrándose repentinamente con un ser extraño.
-¡Hola! -dijo Kirby
El extraño se quedó callado, fingiendo no escuchar a
Kirby.
-¿Eres nuevo por aquí?- preguntó Kirby- Nunca antes lo
había visto.
-S... si. Vengo de una cuidad lejana- respondió el
sujeto.
-¿De los Edificios de Mantequilla? -volvió a preguntar
Kirby.
-De hecho... vengo de un lejano rincón de Pop Star.
-contestó
-No sabía que había otros lugares además de Dream Land.
-dijo Kirby un tanto asombrado- Debería de viajar más por Pop Star.
-¡¿Entonces esto es Dream Land?! -interrogó el extraño- ¡Oh!
¡¡Por fin llegué!! Lo siento, es que llevo varios días viajando en busca
de algo que llaman... la Fuente de los Sueños o algo así, que dicen que
sus aguas son capaces de dar los sueños más agradables. Verá: no hace
mucho, mi pueblo sufrió el ataque de un gran monstruo; afortunadamente
pudimos deshacernos de él. Pero por alguna razón que desconocemos hemos
tenido una serie de pesadillas. Yo fui el elegido para viajar a la
tierra donde fluye una clase de agua que permite quien la beba soñar
grandes y maravillosos sueños; y según información obtenida de las
regiones que he visitado, esas aguas emergen de una fuente en Dream
Land...
-Oh. Sí, aquí es Dream Land- mencionó Kirby.
-¿Podría guiarme a ella? -preguntó el misterioso sujeto.
-Mmmm no lo sé... es muy lejos de aquí, está en la isla
al sureste de aquí.
-Bueno, no importa, gracias de todas maneras. Seguiré
preguntando cómo llegar.
Fue cuando el sujeto misterioso se retiró, Kirby lo
vio unos momentos y luego siguió su camino. Transcurrió un tiempo y con
él un gran tramo avanzado por Kirby, sin embargo alguien lo seguía de
lejos y parecía observarlo con mucho interés...
Calló la noche, Kirby se la pasó caminando, corriendo
y comiendo todo el día, ya necesitaba descansar así que regresó a casa a
dormir toda la noche... y quizá todo el día próximo; aunque aún lo
seguía observando una rara sombra a lo lejos y todo hacía sugerir que
Kirby nunca se percató de eso, antes de que Kirby entrara a su casa la
sombra se ocultó tras unos arbustos al lado de un árbol. Tras cerrar la
puerta de su hogar, la sombra de esfumó.